Los árboles de Navidad artificiales vienen en varios estilos y diseños para satisfacer las preferencias y necesidades decorativas de diferentes personas. A continuación se muestran algunos estilos comunes de árboles de Navidad artificiales:

1. Estilo tradicional: Los árboles de Navidad artificiales de estilo tradicional suelen tener forma de cono, con hojas de color verde oscuro y ramas densas, que se ajustan a las características de apariencia de los árboles de Navidad tradicionales.

2. Estilo de decoración de nieve: este estilo de árbol de Navidad artificial agrega adornos de copos de nieve en las hojas, haciendo que todo el árbol de Navidad parezca cubierto de nieve blanca, creando una atmósfera invernal.

3. Estilos coloridos: Los coloridos árboles de Navidad artificiales son una opción cada vez más popular, con hojas en varios colores llamativos como dorado, plateado, rojo, etc., que añaden un ambiente festivo a las vacaciones.

4. Estilos decorativos: Algunos árboles de Navidad artificiales ya tienen iluminación, adornos o luces de colores en sus hojas, lo que hace que todo el árbol de Navidad luzca más magnífico y ahorra tiempo adicional en decoración.

5. Mini estilo: los miniárboles de Navidad artificiales son adecuados para colocar en espacios pequeños o como decoración de escritorio. Aunque son de tamaño pequeño, aún pueden crear un fuerte ambiente festivo.

Además de los estilos comunes enumerados anteriormente, existen muchos otros diseños y estilos únicos para árboles de Navidad artificiales. Los consumidores pueden elegir el estilo más adecuado según sus preferencias personales y necesidades de decoración.

Existen varias leyendas sobre el origen del árbol de Navidad, siendo la más difundida la historia de Martín Lutero, un reformador religioso en la Alemania del siglo XVI. En una Nochebuena completamente oscura, Luther caminó solo a través de un denso bosque de abetos y se conmovió profundamente al ver la luz de la luna brillando a través de los espacios entre las ramas del camino. Luego cortó un pequeño abeto y lo trajo a casa, decorándolo con velas. Esta tradición evolucionó gradualmente hasta convertirse en el árbol de Navidad brillantemente iluminado que ahora conocemos. Otro dicho es que alrededor del siglo XVI, los alemanes llevaban ramas de pino y ciprés de hoja perenne a sus casas para decorarlas, convirtiéndolas en árboles de Navidad.